11 de junio de 2011

a shining star

Querida yo:
quería decirte que no siempre las cosas salen como una desea, pero que eso no debe frenar nunca nuestra carrera; que sé que es muy duro todo esto, que hay veces que todo te puede, que crees que se te viene el mundo encima, pero siempre habrá algo por lo que volver a ser tú y esa razón no la vas a encontrar escrita en la pared, no la encontrarás en los ojos de nadie, ni en un abrazo, ni una lágrima, ni un helado de chocolate; ojalá fuese así de fácil. Lo encontrarás cuando menos te lo esperes, dentro de ti, en un rincón de tu cabeza donde antes tenías una conciencia, ese pequeño pepito grillo que ha desaparecido. Aprovecho para decirte que una sonrisa no va a arreglar la vida de alguien, pero puede ayudar a que se sienta mejor, tenlo siempre en cuenta. Que las locuras que sueles hacer, no las dejes de lado porque alguien te las prohiba. Que el destino no está escrito, es tuyo y solamente tuyo y puedes hacer con él lo que quieras; por lo que nunca digas nunca, nunca te des por vencida, nunca digas esto es imposible, nunca dejes que nadie pueda contigo. No cuentes los besos que das, ni los te quieros, ni las veces que estás ahí para todo el mundo, porque te faltarían dedos. Ya no eres una niña, lo vas demostrando poco a poco, no dejes de hacerlo. No dejes que nadie te sobrepase.
Nunca dejes que nadie te domine, nunca dejes que te digan lo que tienes que hacer, cómo tienes que vestir, con quién debes ir, de quién te debes enamorar, lo que debes estudiar, lo que no puedes hacer, cómo te debes maquillar.
Porque ¿sabes? al fin y al cabo; todo se resume en una frase: LIVE THE LIFE YOU LOVE.

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